A mis brazos, Navidad...

Es probable que lo veáis muy bucólico pero la realidad es que no pude tomarme el cafelito en la mesa porque la tengo atestada de papeles, libros, restos de goma de borrar, lapiceros, cables, ordenador y hasta un par de calcetines ... y además, ninguna gana de ponerme a ordenar, así que me tiré al suelo y me dije "hoy estreno mi Navidad".

Envuelta en mi primavera con los primeros posos de la Navidad...

Sé que hay muchas personas que afrontan estas fechas con cierta cautela ... emociones que se despiertan, situaciones familiares que revuelven el alma ... ays, ese anuncio de turrón "vuelve a casa por Navidad" ... o el de Freixenet con todo su glamour por no olvidar el de la lotería y todos los sueños que se desatan si nos tocara una "pedrea". La Navidad no deja indiferente a nadie, además son días de ir cerrando el balance personal del año ... de sentirse extrañamente solo en algunos momentos cuando el mundo parece que celebra una gran fiesta tras el vaho del cristal ... curiosamente estos días Campanilla en el cole trabajaban sobre "La Cerillera" ... caray, no recordaba que fuera tan triste aunque su mensaje es maravilloso, una historia que nos recuerda que jamás debemos perder la ilusión por conseguir aquello que anhelamos.

Días de intenso ajetreo emocional, me confieso hasta con pocas ganas de desplegar el árbol de Navidad, exceso de actividad, el coche en el garaje, mi padre viene a casa para descorchar las fiestas y el contrapunto, este año una mujer muy especial no estará organizando la casa ... las calles están envueltas de luz, los niños redactan sus cartas reales y yo hice mi primer brindis y un Feliz Navidad de retina a retina.

Escucho el sonido de la cucharilla ... doy vueltas como quien busca la lectura de su futuro en los posos, otra vuelta y recuerdo que es un buen antioxidante, mi madre abona un bonsai baobab que tiene entre la ventana y el fregadero de la cocina ... mis pensamientos viajan a la misma velocidad que una emoción salta del corazón a la cabeza y viceversa! Bienvenida Navidad!

Y una oración ... Into My Armas de Nick Cave & The Bad Seeds, Amén.