Acortando distancias...

Elijo destino. Aterrizo. Islandia. Alquilas un coche. Despliegas el mapa. Giras la llave de contacto, el motor arranca, hace sol... bajas la ventanilla, te colocas las gafas en el espejo retrovisor, la melena suelta, conectas la música y aceleras... bajas la ventanilla del copiloto aunque el asiento va vacío, el pelo se enreda y sientes como si el miedo se escapara entre remolinos. Cantas. Te gusta conducir, jugar con las marchas en cada curva... parece como si tu estado de ánimo viajara por delante y te fuerza zampando paisajes que proyectas. El móvil en silencio, importante... porque yo elijo mi soledad, yo escojo ser conmigo, la persona más importante de mi vida, YO! Recuerdo una película... Hacia rutas salvajes... me impactó!
Llegas a ningún destino, vas engullendo la línea discontinua de la carretera... paras donde quieres, avanzas hasta el borde del acantilado o es un efecto óptico... en mi sueño caí y volé... avanzo, conversas de todo y de nada, no piensas sólo sientes... si tienes hambre comes y si tienes sed bebes... respiras lento, aspiras pureza... ensanchas el alma al tiempo que los pulmones. Miras despacio, cierras los ojos para suspirar... dilatas las pupilas para cegarte de luz. Reset. Congelas ese instante.
Viajo sola...
Como siempre genial Mela. Da gusto viajar contigo.
ResponderEliminarNunca se viaja sol@ a veces nos acompañan pequeńos seres como moscas u otros insectos. Siempre recuerdos, deseos... A veces conoces a alguien...
ResponderEliminarPor cierto Islandia que bonito destino. Estuve el año pasado en noviembre y tuve la inmensa suerte de coincidir con una Aurora boreal de libro, pero sin trípode ...
Preciosa entrada. Me gusta mucho tu blog! :)
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